miércoles, 31 de julio de 2019

Una experiencia inolvidable para los amantes de la lectura.


Hoy voy a hacer algo diferente a diseñar los libros de los borradores de los escritores que recibo. La verdad siempre he dicho que lo que más admiro de los escritores es ponerse en una hoja en blanco y empezar a escribir. Por eso voy a intentar reflejar lo que hay detrás de un maquetador para que me conozcáis mejor y enseñaros un oficio que me encanta. Hay muchos motivos por el cual adoro mi trabajo, pero hoy quisiera empezar a contaros una experiencia que he tenido este año.

Esta experiencia la tuve en Oporto, donde fui a una de las librerías más bonitas que he visto. A algunos seguro que os sonará ya la librería de la cual hablaré y es en efecto La Librería Lello. Esta librería te transmite algo especial. Su toque de madera, estanterías altas llenas de libros o sus originales escaleras para acceder a la planta superior. Cuando entré, entendí por qué J.K. Rowling se inspiró en este establecimiento para crear  "Flourish and Blotts", su librería en el universo de Harry Potter.

Yo pude aprender algo que afecta a mi trabajo y es que tuve accesibilidad para observar como maquetaban en diversos países como Portugal, Francia, Alemania o incluso Finlandia. También me fascinó su editorial y el acabado que consiguen ya que cuidan mucho la calidad del libro, dándoles toques de un laminado en oro para el borde de las páginas, haciendo portadas en relieve o libros con un tamaño tan pequeño que podrías llevarlo en el bolsillo.

Una cosas de las cosas que me llamó la atención, es que tienen libros que han sido icónicos a lo largo de la historia en su primera edición y una sala especializada donde tienen libros muy antiguos que tienen un gran valor.  Para acceder a esta sala tienes que pedir cita y hacer un registro previo. Y esto fue lo que me faltó ver, así que es una buena excusa para volver a ir a la Librería Lello.

Si tenéis la oportunidad de ir a Oporto, os recomiendo que os paséis por esta maravillosa librería. Espero que os guste.

David Román Alcalde